Todo se pone rigido a medida que crecemos. Los huesos son algo notorio, un dia te das cuenta que te duelen o que no podes subir una escalera como antes, las rodillas, la cadera, la maldita humedad, los crueles años, todo duele, todo se endurece. Nos alejamos de la niñez y de a poco vamos olvidandola. Ya somos grandes llenos de clichés, todo esta volviendose duro. Y donde esta ese niño que eramos? Donde lo dejamos? Al cuidado de quien? Ese nene o esa nena, ese que decia la verdad, que no pretendia nada, que ni sabe lo que es pretender, que no queria dinero, que no simulaba lo que sentia, que conectaba, donde esta? Lo perdimos? Como pudimos ser tan irresponsables de perderlo? Despertemos a la parte mas infantil de cada uno, con un beso como en los cuentos, con una frase de amor, con un abrazo, despertemoslo con un susurro e invitemoslo a pasar el resto de la vida con nosotros, porque ellos son verdad y amor. Despertemoslos asi despues ellos nos despiertan a nosotros.